Reflexion sobre las dificultades que se le presentarán al joven profesor.

Las posibles dificultades  que se le presentarán al joven profesor de educación física.
Es de suma importancia comprender que al momento de egresar de la carrera de educación física nosinsertaremos en un mundo distinto al que nos plantea la teoría. Es decir, un mundo nuevo lleno de situaciones que requerirán de conocimiento teórico, pero en el que a la vez se verá reflejada nuestra forma individual de surfear las olas problemáticas que se nos presentarán, no solo dentro de las diferentes instituciones educativas sino en los distintos ambientes de la educación no formal en los cuales nos podremos desempeñar.

Puede que en la etapa de adquisición de conocimientos tengamos una idea general de los problemas que puedan llegar a surgir en nuestra área, pero déjenme decirles: no es lo mismo tener un conocimiento general de ellos a enfrentarlos y solucionarlos en la práctica. Es por esto que, desde mi poca experiencia, el conocimiento adquirido hasta ahora, y la forma de solucionar los problemas, me atrevo a identificarlos y darle nombre a los mismos; así como también ahondar en cada uno de ellos teniendo en cuenta sus dificultades, nivel de gravedad y posibles desencadenantes si no se solucionan de manera responsable. Peor aún si no tenemos la iniciativa de querer solucionarlos.

Sin duda, a medida que vamos adquiriendo experiencia sobre determinados temas, los problemas se vuelven más fáciles de abordar, y nos sentimos más capacitados para enfrentarlos tratando de buscar y analizar posibles soluciones. Me gustaría detenerme en este punto unos instantes ya que considero que lo más importante a la hora de resolver cualquier tipo de problemática será la EXPERIENCIA, esta es la que marcará la diferencia entre saber qué hacer y –en algunos casos- ni siquiera visualizar el problema, y en algunos casos puede que por falta de ella se cometan muchos errores.

En ese sentido pienso que la experiencia es una herramienta que jugará a nuestro favor a la hora de enfrentarnos a las distintas situaciones que plantea nuestra área, nuestra época, pero es indispensable reconocer que sin la teoría para argumentar y problematizar carecería de validez. Por lo tanto, creo que de esa forma lograríamos ser excelentes profesores, manteniendo el equilibrio entre teoría, valores y experiencia a la hora de brindar soluciones a cuestiones problemáticas.

En algún momento de nuestra carrera todos tuvimos que comenzar a transitar los diferentes caminos que nos brinda esta profesión. Podríamos decir que en algunos casos fueron elegidos a conciencia y el único sentimiento que sobresale es el de la seguridad en esa elección, en cambio, para otros a medida que lo transitan van cambiando de perecer en cuanto a las diferentes ramas que brinda la educación física. Esto se debe a que vamos tomando conocimiento de distintos temas, y de la realidad que propone cada camino elegido. Acá podríamos decir que estamos ante la primera dificultad a la que debe enfrentarse el joven profesor de educación física: la toma de decisión en cuanto a qué camino seguir. Todo esto se plantea, ya que la carrera del profesor de educación física cuenta con un sinfín de posibilidades en las cuales puede desenvolverse. Sin dudas esta es una oportunidad encantadora, pero si lo vemos como un problema -más que una oportunidad- entonces pierde ese encanto. Puede que ante esta decisión tengamos conocimiento de dos grupos: por un lado, los que van decidiendo a medida que van adquiriendo conocimiento, y hacen notar su interés por ciertos temas; por el otro encontramos al grupo que aún no se siente seguro.

La carrera del profesor de educación física cuenta con un abanico enorme de posibilidades en las cuales podemos desempeñarnos, capacitarnos y brindar lo mejor de nosotros. Pero la toma de decisión que debemos realizar frente a interrogantes referidos a nuestro siguiente paso es sumamente importante, con el sólo hecho preocuparnos e ir investigando damos cuenta de nuestra gran voluntad de querer comenzar a brindar lo mejor de nosotros sin importar la disciplina que elijamos. Aunque debemos ser conscientes que sea cual sea esa opción siempre estarán involucrados niños, adolescentes o inclusive adultos, y que cada uno tiene una realidad distinta, capacidades iguales o diferentes y una corporeidad que tendrá que ver con la particularidad única de cada persona con la que tendremos que trabajar. Es por ello que necesitamos conocer, informarnos, capacitarnos, instruirnos y sobre todo ser originales y creativos. Estamos en la era de crear una nueva imagen del profesor de educación física, el que se ingenia y busca la superación, y que quiere dejar una huella positiva en las personas, estudiantes o deportistas que pasen por su camino.

Cuando menciono la importancia de la información y capacitación me refiero a que al momento de enseñar debemos ser conscientes de que trasmitir conocimiento es una gran responsabilidad que debemos asumir, ya que el mismo debe ser el correcto y acertado. Ésta también puede ser considerada una dificultad del docente: la falta de capacitación y -lo que es aún peor- la falta de interés al no querer informarnos y conocer los nuevos desafíos de la profesión. Como dije anteriormente, considero necesario ponerse metas, objetivos, buscar la superación, ser ingeniosos y creativos, ese sin dudas es el primer paso para lograr aquellas virtudes que son necesarias en nuestra enseñanza, ya que los únicos beneficiarios serán los niños y adolescentes que son nuestra futura sociedad. Como jóvenes profesores resulta esencial adquirir este hábito de un constante aprendizaje, para brindar una enseñanza poderosa capaz de dejar huella en los individuos que pasen por nuestras clases. Tener en claro que el hecho de egresar de una carrera es solamente el principio de un largo camino, y no el final.

A medida que transcurre el tiempo, paralelamente a nuestra práctica docente, el mundo va evolucionando; las sociedades van cambiando al igual que sus habitantes, los gustos, las modas, las leyes, los desafíos, la didáctica, la pedagogía, psicología, en síntesis, casi todo. Los cambios son inevitables -hecho que a mi entender es sumamente positivo-, pero como formadores debemos estar en condiciones de estar frente a diversos grupos de alumnos, entre ellos los considerados millennials “los hijos de la tecnología”. Tendremos un trabajo más difícil aun, el de ser creativos e inteligentes a la hora de enseñar, y que el aprendizaje se logre de manera eficaz.

Pero como mencionaba anteriormente el capacitarnos es solo el principio, no se trata nada más de adquirir conocimientos teóricos, sino de tener en cuenta las características de las personas a las que pretendemos enseñar. Los hombres y mujeres no son solamente cuerpos que se desplazan por el mundo, podríamos decir, que se componen de varias dimensiones que nos hacen únicos, desde lo físico, lo intelectual, espiritual y emocional. Allí radica la tercera dificultad, la falta de conciencia sobre a quienes enseñamos y cómo lo hacemos; o si de verdad estamos preparados para trabajar con personas distintas a las que acostumbramos conocer.

Es común para un profesor de educación física con años de experiencia llegar a una institución y encontrarse con niños o adolescentes que poseen algún problema relacionado a la motricidad o falta de maduración, pero  en algunos  casos muchos docentes de esta área  no se sienten preparados para afrontar las discapacidades que tienen algunas personas, de igual modo pasa con el joven profesor de educación física que no cuenta con experiencia, que no está muy seguro de sí mismo, pero esto no quiere decir que no estén  preparados para esta tarea. En todo caso es de buen docente admitir las posibles falencias, y es de grandes profesionales poder trabajar en ellas para no limitarse, por eso, accediendo solamente a lugares confortables.

El motivo por el cual un profesor opta por no trabajar con personas discapacitadas es porque no se siente en condiciones de hacerlo, es muy común que a muchos les impresione la idea de estar parados frente a un grupo de personas con discapacidades, pero déjenme decirles que esa situación es entendible ya que todos somos seres humanos y una de nuestras dimensiones es la emocional, que a veces puede jugarnos en contra.

Muchas veces ésta decisión está ligada a la formación individual de cada profesor de educación física -es decir- se interponen las emociones y sentimientos de no querer brindar una imagen básica a los alumnos, si bien el conocimiento teórico de lo que se debe y no hacer está vigente en nuestras mentes, pero a la hora de ponerlo en práctica puede que fluyan sentimientos que en el proceso de formación no nos enseñaron como abordarlos; y uno de ellos puede ser el miedo donde  su primer punto de ataque está dirigido a  la confianza que cada joven profesor de educación física  tenga en sí mismo y  ,en algunos casos, no permite demostrar todas las herramientas , capacidades, virtudes y  creatividad, al grupo de estudiantes que tenga  en frente; es por  esta razón  que   prefieren  ceder su lugar a un considerado experto en el tema . Pero déjenme agregar que ese “experto” también poseía conocimientos al igual que emociones y sensaciones, que al momento de desarrollar sus clases tuvo que aprender a manejar esa dimensión emocional y darle visibilidad a sentimientos que suman y son positivos en sus clases y a medida que transcurre el tiempo el docente contara con una herramienta más a su favor la experiencia que le permite encontrar respuestas a los desafíos inesperados de la práctica docente. Lo que intento remarcar es que la diferencia estará en dar el primer paso sin acobardarnos para llegar a superarnos. En todo caso los miedos o la falta de confianza deben ser un motor para hacer frente a aquello que nos inquieta y recordar que si brindamos lo mejor que tenemos honestamente siempre estaremos contribuyendo a mejorar la calidad de vida de otra persona.

Entre las situaciones más desafiantes ya mencioné lo que implica trabajar con las discapacidades, aunque también nos encontramos diferentes situaciones que en estos últimos tiempos se ven con mayor frecuencia como enfermedades propias de esta época: la obesidad, los problemas de corazón, el asma, diabetes e hipertensión, sedentarismo, entre otras.

En este sentido cabe reflexionar que cada persona está conformada por un cuerpo que contiene piezas invaluables trabajando con un solo objetivo, reproducir la vida en sí misma. El joven profesor de educación física debe saber que el cuerpo o los cuerpos que tenga delante suyo pueden sufrir algún tipo de alteración, en ese caso estaremos hablando del marco fisiológico-anatómico, y aunque por supuesto no somos doctores también hemos sido formados para trabajar ciertos aspectos, y seguramente seremos recomendados por varios médicos a la hora de acompañar en la realización de actividades físicas y recreativas que contribuyan a mejorar diferentes problemáticas, como podrían ser problemas de colesterol, hipertensión u obesidad, entre otras tantas.

Respecto de esto último considero que no solamente debemos trabajar cuando la enfermedad está avanzada, o ya está instalada en el organismo, sino que principalmente podremos ser una herramienta de prevención de esas y otras enfermedades más que actualmente preocupan a la sociedad en todo el mundo. En este punto, podemos decir que muchas veces estamos también delante de otra dificultad; la falta de difusión, explicación y argumentación acerca del porqué de la necesidad de una educación física que promueva actividades a favor del bienestar y la salud, desde las bases teóricas con las que fuimos formados, las que podremos incorporar con la formación permanente y los conocimientos que ya poseemos.

Es muy común escuchar que la actividad física nos conviene por cuestiones estéticas, y nada más. Las posibles dificultades  que se le presentarán al joven profesor de educación física.
Cosa que es ser cierta, aunque el cambio en realidad sucede por dentro para luego transformar nuestra imagen física.  Sin dudas comenzar a cambiar la perfil que tenemos de la actividad física sería muy beneficioso para todos, es decir, si sólo la vemos desde el aporte estético esteremos dejando de lado a una gran parte de la sociedad, ya que los que están pendientes  y ligados a la apariencia física es una parte de ella excluyendo al resto   Por otro lado, si comenzamos a cambiar la imagen y lo llevamos a un aspecto más profundo y antes de comentar que mejora nuestra apariencia, comenzamos por brindar información correcta, es decir, si estamos bien internamente eso se verá reflejado en nuestra imagen. Como sugerencia podemos recordar y nombrar a la O.M.S (organización mundial de la salud) los datos que brinda esta organización son confiables y están muy ligados a la actividad física promoviendo e informando acerca de los beneficios que la misma brinda a las personas. Entiendo que muchas veces no se explican de manera “profunda” algunas argumentaciones sobre nuestro trabajo, probablemente sea para evitar largas y tediosas explicaciones de conceptos ligados a nuestra área, pero es necesario no subestimar la capacidad de comprensión de los demás. Sinceramente soy de las personas que creen que podemos explicar, o dar a conocer la información que quizás conlleva mucha terminología de una manera más fácil y práctica, con el fin de enseñar a las personas y promover la difusión de la información correcta.

En fin, para concluir esta reflexión considero que hay muchas posibles dificultades  que el joven profesor de educación física tendrá que ir afrontando de las cuales solo nombre algunas, pero pienso que la mayor de todas será la de realizar aportes a la generación de una imagen distinta a la que se percibe, es decir, hacer visible las capacidades con las que cuenta para estar delante de un grupo, superarse y comprometerse con su trabajo, así como muchos docentes de todas las áreas lo han hecho y su trabajo hablará por sí solo. 

Autor: Marquez Daniela Laura

Año: 2018